La cura de enfermedades entre los indígenas Wayuu, en La Guajira, se apoya en las plantas y en los espíritus. A través de sus médicos tradicionales y ritos ancestrales superan sus dolencias, muchas de ellas provocadas por animales que los rodean.
Esta etnia ha logrado conservar un gran acervo cultural alrededor de las prácticas medicinales. El estudio realizado por el profesor de la Universidad de la Universidad de la Guajira, Jairo Rafael Rosado Vega, en los municipios guajiros de Riohacha, Manaure, Maicao y Uribia, determinó que existen 175 plantas asociadas al tratamiento de un gran número de enfermedades que aquejan a los indígenas.
Los resultados obtenidos permitieron identificar una gran biodiversidad florística ligada a los mitos y creencias de los Wayuu, y la influencia de un conjunto de animales de los cuales se derivaría la transmisión y generación de las enfermedades que los aquejan.
Los conocimientos de la medicina ancestral Wayuu y del uso de las plantas está en manos de Ouutsü (Piache-Médica) y Alüjülii (Yerbateras), considerados los especialistas más respetados entre las comunidades.
Los Piache son, en su mayoría, mujeres, entre ancianas y jóvenes, dotadas de un poder sobrenatural que proviene de espíritus llamados Asheyüü o “buenos Wanülüü”. Según la tradición, son evocados absorbiendo jugo de tabaco masticado, cantando y agitando una maraca; son ellos los que revelan el nombre de la enfermedad, identifican a los “dañadores” del alma del enfermo y sugieren el tratamiento.
Las Alüjülii o yerbateras son mujeres que han recibido sus conocimientos en forma oral de generación en generación, son dotadas de la facultad de conocer las plantas medicinales y gozan de un profundo respeto y prestigio entre las comunidades. Ellas las recolectan, preparan y usan para prevenir y curar las enfermedades.
Planta de Malambo. |
Estas indígenas disponen de un amplio inventario de plantas y tratamientos que requieren de ciertos rituales para hacer efectivas sus terapias. Según la tradición, si se omite algún paso la planta pierde la efectividad para el tratamiento de los pacientes. Además, no se tratan solamente los síntomas que presenta el enfermo; le dan más importancia a sanar simultáneamente el cuerpo, la mente y el espíritu.
Entre los Wayuu también es posible encontrar algunos que, como en la medicina occidental, se especializan en determinados tratamientos. Según Rosado Vega, esos especialistas son los Jiipüpala, “para arreglar los huesos”; Jupula tepiche, “especialista en niños”; O’uupala, “para sanar las enfermedades de la vista”; yEemeijut, “especialistas en embarazos y partos”, entre otros.
A ellos se suman los chamanes, quienes tienen a su cargo los ritos con los cuales se tratan ciertas enfermedades consideradas graves y requieren algo más que plantas para su tratamiento. Estos individuos está ligados más al mundo esotérico y extrasensorial que al físico. En la etnia Wayuu, la mayoría de los chamanes son mujeres.
Pero, ¿cuáles son las enfermedades que aquejan a los Wayuu? Según lo registró la investigación, las hay de dos tipos: aquellas no graves, llamadas Ayuulee, y las consideradas malignas y de alguna manera terminales, conocidas como Wanülüü. Las primeras son atendidas por las yerbateras y se trata de síntomas comunes provocados por aguas contaminadas o por el viento, el aire y el polvo; las segundas son las más graves, tienen carácter irreversible y ocasionan la muerte o como dicen los nativos, la “salida definitiva del alma”, entre ellas estarían el cáncer y los problemas cardiacos.
Más allá de esas enfermedades están las que padecen los niños y niñas Wayuu. Se les designa como Pulajuwaa y se les considera males provocados por Kapulainsu, animales que contaminan. Para su tratamiento, deben recurrir a los chamanes. Entre los Kapulainsu sobresalen el rey zamuro, mochuelo, la cotorra, el gavilán, el grillo blanco, el venado, el mono titi y la serpiente, entre muchos otros.
En suma, en estos tiempos dediálogo de saberes que reclama el reconocimiento mutuo de lo moderno occidental con las tradiciones, la investigación de Rosado Vega reivindica la medicina tradicional Wayuu y evita que esa herencia ancestral se pierda en el olvido.
JUAN DIEGO RESTREPO
Versión periodística el texto Plantas y enfermedades en la cosmovisión Wayuu, de Jairo Rafael Rosado Vega jairorosado@yahoo.com. Biólogo. Magíster en Ciencias del Mar. Docente investigador de la Universidad de la Guajira en la Facultad de Ingeniería. Director del Grupo de Investigación Pichihuel. Universidad de La Guajira. www.Uniguajira.edu.co